
El Trapiche
Único centro natural del país en que el pueblo constituye un refugio antiestrés brotado entre las sierras, a la vera de ríos y bajo el cálido sol, El Trapiche se sitúa en el centro de San Luis, hacia el noreste de la capital provincial. Definitivamente turística y veraniega, La Florida surge y se desarrolla en sus cercanías, junto al embalse homónimo, constituyendo en conjunto una comarca de significativa resonancia.
El Trapiche conjuga en su territorio la tranquilidad del poblado, el verde de la vegetación y el río de su mismo nombre, conformando un espacio perfecto para el descanso y la recreación. Asadores, y alquiler de bicicletas y caballos, son algunos de los servicios que presta esta encantadora villa, la cual ofrece además, a apenas tres kilómetros de distancia, el acceso al balneario SieteCajones con sus piletas naturales, ideales para refrescarse en aguas claras y dorarse al sol en el marco de un paisaje paradisíaco.








El origen de esta villa veraniega retrotrae al 1792, año en que se firma en la ciudad de San Luis la escritura de arrendamiento por medio de la cual los herederos de Don José Sosa otorgan a Don José Rocha un terreno situado en el paraje denominado, hasta entonces, Las Tapias, y a la vera de un río de considerable caudal. Este acuerdo encontraba su fundamento en la necesidad de construcción de un “trapiche” para pulverizar el oro bruto que se extraía de las minas de La Carolina.
Lo que se trató en un principio de un Molino hidráulico destinado a moler minerales, vería luego el surgimiento de un Molino Harinero, y progresivamente el desarrollo de una villa que llevaría el nombre de El Trapiche, en memoria de su punto de surgimiento.
Por su parte, la historia de La Florida comienza con los asentamientos aborígenes en la zona y la posterior llegada de los primeros europeos. Ya en el Siglo XX, el espacio delimitado por los ríos Trapiche, Grande y Quinto, comenzó a ser elegido por los puntanos como centro de veraneo, construyéndose finalmente el Dique La Florida, en la confluencia de los cursos mencionados, y determinándose con esto el desarrollo de una villa turística.
Caminos Turísticos
El Trapiche es atravesado por al menos tres caminos turísticos orientados hacia el disfrute de diversos atractivos o actividades. Avistaje de cóndores en pleno vuelo, acceso a pintorescos parajes cercanos, encuentro con majestuosos panoramas acuáticos y vegetales, son algunos de los privilegios hacia los que conducen los circuitos más conocidos de esta ciudad de San Luis.
- Buscando al Señor de los cielos “El Condor” (hacia La Carolina)
- Por la Estrella de los Siete Rumbos (hacia Paso del Rey)
- Del Virque (hacia San Luis Capital)
Paseo de los Artesanos
Propio del respeto por las tradiciones y la cultura sanluiseña, cada verano la maravillosa calle costanera del río El Trapiche luce las formas, colores y texturas que los artesanos de la zona saben dar con perfección a sus piezas artísticas.
Objetos decorativos, tallas, tejidos artesanales, y los deliciosos dulces y alfajores regionales hacen de este paseo un atractivo ineludible dónde adquirir el típico recuerdo, y conocer un poco más de la cultura local.
Complejos Balnearios
En el paisaje contextual de El Trapiche- La Florida, se destacan los parajes de Río Grande y Siete Cajones por contar estos con cabañas y residencias enclavadas entre las sierras. Imponentes piletas naturales en el cauce del río, conformadas por blancas rocas surgentes del mismo lecho; entorno pleno de vegetación y bellezas; y los mejores servicios y comodidades, Río Grande y Siete Cajones invitan a deleitarse con apasionantes jornadas en familia o entre amigos.
Descanso, relax, infinidad de sensaciones y bienestar general, ambos espacios constituyen atractivos que ningún visitante de la zona puede dejar de disfrutar.
Embalses
Dique Antonio Esteban Agüero: enclavado en medio de antiguos cerros, componentes la serranía puntana, este dique embalsa las aguas del arroyo Los Manantiales y el Río Grande, principal afluente de agua potabilizadora de la ciudad de San Luis.
Dique La Florida: su espejo de agua cubre una superficie de 728 hectáreas y alcanza una profundidad ideal para la práctica de apasionantes deportes como el buceo. Este dique aparece además como un perfecto pesquero de carpas y pejerreyes, tentando a los amantes de la pesca a arrojarse a la captura desde los murallones de su estructura. Deportes náuticos sin motor, safaris fotográficos en los alrededores, y mucha naturaleza, este espacio es ideal para disfrutar de los momentos más apacibles y agradables.
Reserva Florofaunística
Creada con el objeto de preservar los recursos naturales incentivando en la población la tan valiosa conciencia ambiental, la Reserva Florofaunística de La Florida persigue actualmente el conocimiento de las especies de flora y fauna propias de San Luis y la repoblación de los ecosistemas con ejemplares nacidos en la reserva y liberados, abocándose principalmente a la regeneración de las especies en peligro.
Consiste en un paraje natural educativo de 340 hectáreas, cuya maravillosa belleza puede admirarse desde la costa del Dique- Embalse La Florida.
Pueden observarse y conocerse aquí vegetales como caldenes, molles, talas, chañares, espinillos, breas y algarrobos blancos y negros. Mientras que entre los animales es posible avistar pumas, jabalíes, guanacos, lagartos, vizcachas, zorros, ñandúes, quirquinchos, ciervos, nutrias, aves acuáticas, serpientes y muchas más.
Se extiende entre las localidades de La Florida y El Trapiche, lindando con el Dique La Florida.
La Carolina
Encantador pueblo tendido al pie del Cerro Tomolasta, La Carolina expone ante el viajero su pasado como productor de oro. Fundado en 1792 por el Marqués de Sobremonte, quien bautizó al paraje que originaba con el nombre de “La Carolina” en honor a Carlos III de España, hospedó en su territorio a muchas empresas dedicadas a la explotación del oro, preciado mineral que se agotó 60 años después.
Actualmente, conserva gran parte de su arquitectura original, con sus construcciones de adobe, piedra o ladrillo bordeando su única calle. En su extensión pueden vivenciarse apasionantes excursiones por el interior de la antigua mina de oro, búsqueda de oro en el río, rappel, tirolesa, ascenso al cerro que custodia la localidad, visita al museo de piedras, y otras tantas opciones igualmente fascinantes.
Emplazada unos 45Kms. hacia el norte de El Trapiche, se accede a ella por Ruta Provincial Nº 9.